Practicar un deporte es esencial para mantenerte con energía durante tu jornada laboral, además de tener la energía necesaria para desempeñar tus tarea diarias.
Comenzar tal vez sea difícil, mantenerse haciendo ejercicio de forma cotidiana es lo complicado. Por ello te damos unas recomendaciones básicas para que tu primer encuentro con el deporte no sea catastrófico.
- Con calma. No intentes hacer todo el ejercicio que no has hecho en meses o en años en un solo día. Trata de mantener la calma y avanzar a tu ritmo. No por excederte de ejercicio un solo día ya obtendrás los resultados que buscas, ve poco a poco.
- Ponte metas alcanzables. Tal vez no tienes la mejor condición del mundo por el momento, lo ideal es que empieces poco a poco. Intenta caminar primero antes de aventurarte a un nuevo deporte. Con pequeñas metas a la semana o al mes, tus resultados serán más visibles.
- No te olvides de la comida. No esperes que el ejercicio haga todo el trabajo, si tu objetivo es sentirte mejor y menos estresado en la oficina, o tal vez bajar de peso, intenta alimentarte correctamente y mantenerte hidratado todo el tiempo.
- Pon en un calendario tus días de ejercicio. Si vas empezando, no es lo más recomendable hacer ejercicio todos los días, comienza con dos a tres días en lo que vas agarrando condición o combina diferentes disciplinas para abarcar más espacios a la semana sin enfocarte solo en un deporte.
- No te presiones. Seguro ya tienes bastantes preocupaciones en el trabajo como para aumentarlas con el ejercicio. Comienza a ver la práctica de una actividad física como una forma de escape de tu rutina diaria, eso te ayudará a enfocarte y disfrutar más esos espacios únicos.
