Cuando hablamos de Inbound Marketing sabemos qué procesos debemos llevar, para lograr la captación del cliente y con ello generar leads necesarios para convertirlo en ventas para nuestro negocio.
Pero ¿qué debemos medir, para aplicarlo mejor en nuestra estrategia?

Crecimiento en ventas
Al final de todo el proceso de una estrategia digital, las ventas nos harán ver qué tantos buenos resultados generó nuestra implementación y con ello la rentabilidad final de la campaña.
La medición del crecimiento de ventas nos ayudará a planificar sobre el futuro y con ello, a predecir tendencias de nuestros consumidores.

Leads: la cantidad de leads que generes, será una mayor oportunidad de cerrar una venta.
Aunque existe una diferencia entre los que son un contacto que hemos identificado como parte de nuestro grupo y los que han tomado la decisión de cubrir su necesidad con nuestro producto.
Por ello, es importante generar una base de datos con la diferenciación de uno y otro para poder abordar el ratio leads to close.

LTV (Lifetime Value of a Costumer): es una métrica muy importante para medir el ROI de la empresa y determinar el momento de comenzar a elaborar estrategias futuras para el negocio.

Conversiones a leads: de todas las visitas a tu sitio web o dentro de la campaña en redes sociales, ¿cuántas se convierten en leads? Esta métrica mide dos cosas muy interesantes:
1. La calidad de tráfico
2. La tasa de conversión
Lo que es realmente interesante aquí, es ver cuánto nos cuesta cada lead y con ello determinar los puntos de fuga del embudo de conversión.

Engagement en Redes Sociales: la estrategia en estas plataformas nos permite distribuir nuestro contenido e interactuar con los usuarios actuales y clientes potenciales.
Medimos impresiones, clics y reacciones.

Conversiones por Landing Page: las landing page cubren nuestra necesidad de atraer a los usuarios adecuados, para ello necesitamos conocer cuáles son las que mejor están midiendo clics en el CTA, profundidad del scroll, y obviamente, leads.